miércoles, noviembre 19, 2008

¿Cómo le digo que esto ya no es lo mismo?

¿Cómo se lo digo que cuando atravieza la puerta me corre un sudor frío en la espalda... que me enajena que esté cerca... que ya no aguanto su 'aroma'? 

¿Nunca tuvieron a un compañero de trabajo que desprendiera ese rancio olor a 'la última vez que me bañé los españoles no habían llegado a América'

Lo tengo en la oficina de al lado, lo escucho llegar a la mañana y cuando abro la puerta para buscar café -encima tengo esa mala suerte: la máquina de agua y café está en su oficina-, siento ese olor... mezcla de desodorante barato Axe y traspiración de varios días. 
Contengo la respiración, entro, lleno mi taza grande de café, de manera de no tener que volver por un largo rato y salgo casi tan rápido como entré. 

Ayer (o anteayer) tuvo la bendita idea de llegar limpio. Pero sé que no va a pasar mucho antes que vuelva a desprender su 'aroma' distintivo. 

Ya no sé a quién encomendarme... a Jehová, Odín, Alá, Ra, Zeus,  Vishnú o a los de salubridad. 

¿Cómo se lo digo?

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7 Comments:

Blogger Perséfone said...

Esun tema complicado.

¿losjefes no le dicen nada? Aunque no trabajes de cara al público la higiene debería ser un requisito indispensable en el trabajo, ya no por uno mismo, si no por respeto al resto de compañeros.

Puedes probar a mandarle una carta anónima. xDDD

Un abrazo.

noviembre 20, 2008 12:56 a. m.  
Blogger Mendocina Falsa said...

Ya me está preocupando la similitud de cosas por las que pasamos.
Tengo una compañera con las mismas características, pero sumado al mal olor se le agrega que es chusma, es muerta de hambre y obsesiva con su trabajo, pero obsesiva no dentro de los parámetros normales, obsesiva a niveles sospechosos.
Hace cuatro años que convivo en la oficina con ella y digamos que ya estoy casi inmunizada al olor, aunque... los días de calor se complica.
Ni bien entró a trabajar en la oficina, todos nos dimos cuenta del problema y le fuimos a hablar, fuí yo con otra compañera más y te digo: fue una de las situaciónes más incómodas que viví en mi vida, yo casi no hablé, hablo la otra.
Igual creo que por el bien tuyo y de él tendrías que buscar la forma de decírselo, no sé sútilmente, tal vez le podés regalar un desodorante para fin de año o ponerle uno de esos aromatizantes de poett en la oficina o derramarle sin querer la taza de café en la camisa para que se tenga que lavar la ropa.

Besos Marlboro Man

noviembre 20, 2008 9:46 a. m.  
Blogger synkro said...

Hace un tiempo tuve la desgracia de tener un jefe pestilente, no hay solucion, lo unico que te queda es rezar por que tu estomago no se revuelva. Al menos lo tenes en otra oficina, a mi jefe lo tenia practicamente al lado. Una pregunta, tu jefe es morfeta? no lo digo por nada en particular, me jefe si lo era y quizas pueda sacar alguna conclusion... pero bue..
Cuidate Mostro de los 7 mares

noviembre 20, 2008 2:43 p. m.  
Blogger Lola said...

jajaja primero, tu mensaje me causó mucha gracia..
segundo, es una fiaca la gentee suciaaa!! yo tenia una compañera del cole que estimamos que c bañaría un promedio de 5 veces al mes.. con suerte! y encima me la habian sentado al lado en computación, es así... no se puede hacer mucho más que practicar ejercicios de respiracion y contenerla lo más q puedas jajaja
saludos nene!

noviembre 20, 2008 2:47 p. m.  
Blogger Luli =) said...

hola!!!
gracias por la buena onda!!!
se qe lo bueno empieza ahora =P jaja

qe bajon lo de tu compañero=(
en mi escuela habia uno igual, y hasta fueorn hablar a la rectoria para qe se bañara...
el chico obvio se qeria morir, xqe los compañeros habian llevado desodorante de ambiente al curso ajaja...

bueno te mando un bso

Lu

noviembre 20, 2008 7:42 p. m.  
Blogger Joseph said...

Perséfone Los jefes se ríen. Es muy buen empleado. Salvo ese pequeño detalle de tener olor rancio. Y lo de respeto... bueno, no se respeta a sí mismo, no se puede pedirle mucho... :P

Jajaajjaajaa lo de la carta anónima es buena, la voy a anotar.

¡Abrazo!

Mendo Te compadezco que tengas que compartir la oficina con alguien así. Jajajjaja ¿Te parece que regalarle un desodorante para fin de año es sutil?

Me interesa saber qué le dijeron y cómo, con tu compañera a esa chica. Y cuál fue su reacción.

Besos Mendo

synkro Uff... si el del mal olor fuera mi jefe estaría en el horno. Pero no, mi jefe no es morfeta, tiene pinta de ser sexópata. Pero eso es para otro post.
Un abrazo, synkrett, en Marlboro Man Experience siempre celebramos tu visita (celebramos con gaseosa, claro).

Lola ¿Viste? También soy gracioso. Ja.
Claro, es complicado porque no sabés como bajarle la guillotina a alguien a quien tenés que ver varias horas por día, todos los días.
Encima se viene el verano. Y encima en verano, en el Microcentro hace dos o tres grados más que en el resto de la Ciudad de Buenos Aires.
¡Saludos!

Luli=) ¡¡Hola!!
Lo de llevar un desodorante de ambiente es una idea magnífica. Pero lo malo es que el olor corporal no desaparece, queda escondido... por un rato.

Pensé en ir a trabajar en barbijo, al mejor estilo Michael Jackson (pero con menos menores de edad alrededor).

Beso.

noviembre 20, 2008 10:38 p. m.  
Blogger synkro said...

La coca cola es un veneno, te floja los dientes, y te pudre las tripas, prefiero un jugito de naranja =P

noviembre 21, 2008 11:26 p. m.  

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