miércoles, junio 01, 2005

"Yo a las minas me las levanto así..."

Compartiendo una(s) cerveza(s) con amigos, comienzan las charlas etílicas que van desde momentos de los Simpsons, la peli del momento, o anécdotas que nos incluyen como protagonistas alcoholizados, hasta el inevitable tema eterno de cualquier mesa de hombres: mujeres.

Desde que tenemos 13 años, cuando empezamos a notar que las chicas se vuelven visiblemente mas bonitas y coquetas, y que en sus cuerpos hacen su llegada dos objetos de nuestro deseo, comenzamos a pensar en sexo todo el día (16hs. O 24hs. si incluimos sueños húmedos). Eso consecuentemente nos pone en el camino de buscar, como alquimistas, la fórmula mágica que nos vuelva irresistibles con el sexo opuesto (o el mismo, para los raritos) y nos permita arrancarnos todas las minas del lugar donde estemos.

La mesa comienza a estar superpoblada de botellas vacías y las técnicas de seducción florecen, como buen oyente, me callo y tomo nota (en negrita mis reflexiones):

“La onda es esa, la mirada... siempre se gana con eso”
“Le clavas la mirada y empezás, "mirame, mirame, mirame…” y siempre funciona”

Eso no era una publicidad de Telecom? a mi una persona me clava la mirada por 30 minutos y lo primero que pienso es que es un potencial psicópata y lo próximo que me va a clavar es un cuchillo.


“A las chicas las tenés que hacer hablar, siempre hay temas de conversación si estas en un bar y o boliche:
¿Como te llamas?
¿Sos de acá?
¿Venís seguido acá?
¿Estás con tus amigas?
¿Tenés novio?
Respuesta negativa y...
Naaaah, mentira! Una mina como vos sin novio? no te creo nada.

Y ahi empieza el chamullo de enserio”

Dudo que una flaca hoy en día (y 30 años atrás también) aguante -despierta- semejantes preguntas… y el chamuyo que venga después no creo que sea mejor (eso si la chica a esas alturas no se durmió o salió corriendo despavorida)… Un poco más de originalidad, por favor.


“Si lográs que acepte la invitación a tomar algo, procurá que el trago que tome sea lo más fuerte posible, de esa manera no hay feo que no se vea bien”

Claro, también está eso de “de noche todos los gatos son negros”. Ahora, una chica mas o menos inteligente puede percibir en eso que la querés alcoholizar y tenés malas intenciones con ella, más si le ofrecés de tomar tu propio trago (puede tener cualquier cosa).
Una chica más inteligente puede aceptarte el trago (servido a la vista de ella)… y otro… y otro… Si después de limpiar tu billetera no te la ganás? Qué hacés?


“Lo mejor para chamuyar y/o dirigirse a las mujeres, es el alcohol... entrar entonado a un boliche es lo mejor…”

Esto es algo muy recurrente, pero creo que no debe haber cosa mas odiosa que un flaco que no puede ni mantenerse en pie, se pone pesado y encima se enoja si es rechazado.
A mí me gusta beber. Lo disfruto. Pero cuál es la distancia entre “entonado” y “medio borracho”? no mas de 1 o 2 cervezas… y si a eso le agregás un trago u otra cerveza llegás a “borracho de mierda”. Encima yo tengo el problema que por más que 2 cervezas sean poco, se me traba rápido la lengua… y si estuve consumiendo sustancias prohibidas por los Dioses (ya no lo hago) ni siquiera encuentro la sintaxis para decir “tenés fuego?”.


Y hay más:

“Si no ganan de lindos, ganan de inteligentes o mejor dicho de cultos, leyéndose 3 libros…”

Ahora la mina te sacó de esos 3 libros q leíste....y en dónde nos metemos?!?

“A las minas tenés que demostrarle poder”

No, no lo dijo Coppola.


Bonus Track:

“Lo que no puedo entender es cuando están bailando, las invitas a bailar con vos y te dicen: "no, estoy cansada, no tengo ganas de bailar"”

Convengamos que no se va al boliche únicamente a tranzar, algunos van a… bailar, no?
Además hay que tener cuidado con ponerse pesado, a nadie le gusta que lo agarren por atrás y te saquen a bailar como si no tuvieras derecho a elegir.
Además eso puede ser una forma sutil de decirte “tomatelas, gordo, y largá esa costilla de cerdo que hace media hora se le acabó la carne”.



Bueno, para terminar, estás cosas las escuché mas o menos desde los 16 años a los 21 (tengo 22, casi 23).
Ninguno de mis amigos actuales utiliza ninguna de esas técnicas de levante (de hecho, casi exclusivamente nos dedicamos a la bebida y a contar mentiras en algún bar o pub).
Si me preguntan que me da derecho a opinar sobre el tema diré que poseo una gran experiencia (no experiencia en levantar mujeres, sino en ser rechazado).

Muchachos, no pequemos en ignorantes, las minas saben a lo que vamos, están al tanto que no nos acercamos a ellas para ser amigos e invitarlas a jugar un picado el domingo. Y menos si las miramos con los ojos llenos de libido.