martes, mayo 24, 2005

Imaginate que estás medio drogado por la anestesia en medio de una operación y escuchas...

"Todo el mundo quieto!! ¡Perdí mis lentes de contacto!"


"Uf... de nuevo un apagón!"


"Acepta este sacrificio... oh Señor de la Oscuridad!"


"¡¡Persigan a ese perro y traigan lo que se llevó!!"

"Oigan... si este es el hígado... ¿¿eso que es??"

"Enfermera... páseme esa... ehmmm, ¿cómo se llama ese aparato?"

"Mejor guarda eso, lo vamos a necesitar para la autopsia."

"Ay, se me fue la mano!... ¿saben si alguien sobrevivió a 500 ml de esto antes?"


"Ustedes saben que pagan muy bien por los riñones... ¡total, este para qué quiere dos!!"

"Oye, ¿quién puso esto aquí?"

"Pueden parar a esa cosa de latir? Me hace perder la concentración..."

"Uf, ¡detesto cuando se me cae algo aquí dentro!"

"Cómo??, ¿este paciente no era el del cambio de sexo?"

"No te preocupes, creo que si esta bien afilado..."

"FUEGO!! ¡¡FUEGO!! ¡¡Todo el mundo afuera!!"

"Oh No! ¡Justo la página 47 del manual no está!"

"Enfermera, este paciente firmó la tarjeta de donación de órganos, ¿verdad?"

Leí hace mucho en algún lado o spam... pero me mató de risa. Casi se me descocen los puntos de la operación de apéndice.